A diario podemos experimentar antojos, como a las 10 de la mañana o incluso a las 12 de la noche. Por lo que básicamente todos los días debemos resistir las tentaciones de la comida a deshora. Pero antes de pensar en debilidad, piensa que tu cuerpo te puede estar diciendo algo. Recordemos que nuestro cuerpo es una biocomputadora que no comete errores.
El cuerpo cuenta con cerca de 100 billones de células conectadas entre sí y trabajando 24/7. De esta forma, podemos respirar, escuchar, oler, ver, sentir, moverte, en otras palabras vivir. Pero, ¿qué tiene que ver esto con los antojos? Simplemente es un mensaje de nuestro cuerpo de que falta algo, tratando así de mantener el equilibrio.
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¿Qué causa los antojos?
Los antojos por alimentos son causados por las regiones cerebro responsable del placer, la recompensa y la memoria. Por lo que un desequilibrio hormonal como la serotonina y leptina pueden causar antojos. Pero también puede causarse por las endorfinas liberadas en el cuerpo luego de que alguien haya comido, lo que significa adicción.
Las emociones pueden producir un antojo de comida, en especial si se come para sentir confort. Las mujeres embarazadas experimentan fuertes antojos, pero se deben a sus cambios hormonales que alteran el gusto y el olfato.
Es posible que también haya una relación entre los antojos y los nutrientes. De manera que el cuerpo anhela alimentos porque necesita algunos nutrientes. De manera que este deseo puede ser selectivo o no selectivo.
Antojo selectivo y no selectivo
El antojo selectivo es aquel por una comida en específico, como una barra de chocolate, una hamburguesa de un restaurante en particular. O incluso una bolsa de frituras de tu marca preferida.
Mientras que el antojo no selectivo es el simple deseo de comer cualquier cosa. Pero esto no solo puede ser un síntoma de hambre, sino también de sed. Es por eso que beber agua muchas veces ayuda a reducir el antojo no selectivo más fuerte.
Cómo reducir los antojos
Hay muchas formas de formas de reducir las ganas de comer a deshora. Si tratas de llevar una vida saludable y los antojos son un obstáculo, solo sigue los siguientes consejos.
Evita el estrés
El estrés y la mala alimentación pueden causar serios problemas de salud. Al sentir estrés pueden dar ganas de comer (alimentación emocional) y comer por antojo puede resultar reconfortante.
Dormir lo suficiente
No dormir lo suficiente puede alterar el metabolismo y equilibrio hormonal del cuerpo. Este desequilibrio puede provocar a comer en exceso y por supuesto, aumentar de peso.
Beber suficiente agua
El hambre y la sed producen una sensación muy similar en el cerebro, por lo que puedes confundirte. Una manera fácil de reducir el antojo es mantenerte bien hidratado durante todo el día. Además, beber agua te ayuda a limpiar las toxinas del cuerpo, por lo que sientes más sensación de bienestar.
Comer suficientes proteínas
Una dieta saludable debe contener muchas fuentes de proteína, esto ayuda a reducir los antojos. De hecho, las dietas altas en proteínas pueden reducir los antojos hasta en un 50% por sí solas.