La homosexualidad para muchas personas va en contra de las leyes de la naturaleza. Esto siempre ha sido asociado exclusivamente a los humanos, a su psique y a su comportamiento. Pero, lo cierto es que existen ejemplos de animales homosexuales. De hecho, en algunas especies, la homosexualidad representa una ventaja evolutiva.
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Los gansos homosexuales y la teoría evolutiva
Los gansos son animales monógamos, es decir, pasan toda su vida con un solo compañero y solo buscan otro si su compañero muere. En Canadá, hasta el 30% de estos gansos son homosexuales.
El biólogo Jurt Kotrschal ha dedicado años a estudiar a estos animales. Su investigación indica que la homosexualidad es útil para esta especie. Ya que los compañeros machos tienen más probabilidades de ocupar un nivel más alto dentro de las colonias de gansos. Esto hace que sea posible fertilizar hembras solitarias, mientras continúan con sus parejas del mismo sexo. Esta es solo una de las teorías que revelan la ventaja evolutiva en los animales homosexuales.
Estos estudios tienen como objetivo explorar el comportamiento homosexual como una respuesta evolutiva a los cambios ambientales. El entorno termina este tipo de cambios, lo que lleva a las especies a cambiar sus comportamientos afectivos y sexuales.
Los gansos no son las únicas aves homosexuales
En las aves, todas las especies que forman relaciones parentales lo hacen en mayor o menor medida con miembros del mismo sexo. De hecho, una cuarta parte de los cisnes negros son homosexuales.
Los pingüinos han establecido relaciones entre ejemplares del mismo sexo en zoológicos en distintas partes del planeta. Hay estudios que demuestran que el 85% de las parejas lesbianas la componen las gaviotas occidentales.
Pero no solo las aves como estas mencionadas o palomas, buitres son animales homosexuales. Los lagartos, macacos, ovejas, libélulas, moscas, hienas y muchas otras especies están desafiando la idea de que la homosexualidad es “antinatural”.
Otros animales homosexuales
En animales como el gato montés, bisonte americano o los elefantes, se ha observado cómo tanto hembras como machos cortejan y se aparean con otros animales del mismo sexo. Los bonobos establecen sociedades matriarcales, donde el 60% de las relaciones sexuales ocurren entre hembras.
En las jirafas, 9 de cada 10 apareamientos ocurren entre machos. Y en el caso de los leones, el 8% del apareamiento es entre machos. Mientras que en el caso de los perros, hay varios estudios que afirman que hay patrones de comportamiento homosexual.
El rechazo de la homosexualidad por parte del a mayoría de las sociedades ha perjudicado el surgimiento de una realidad. Una realidad que muestra que las relaciones entre individuos del mismo sexo es algo normal en todas las especies y forman parte de su evolución. Pero debido a esto, es probable que en el futuro no se realicen muchos estudios en cuanto al comportamiento de los animales homosexuales.