¿Sabes cuál es el marsupial carnívoro más grande del planeta? Se llama demonio de Tasmania, y su nombre de debe a que tienen un mal carácter y emiten unos ruidos bastantes molestos. Viven desde hace cientos de años, en una isla australiana llamada Tasmania. Y aunque formaban parte de otros hábitats, hace 400 años se extinguieron quedando solo en la región que lleva su nombre. Sigue leyendo, y entérate sobre algunas curiosidades de este feroz y malhumorado animal.

Curiosidades del demonio de Tasmania

1.       Aspecto físico

Los demonios son en su mayoría de color negro, pero por lo general tienen marcas blancas en alguna parte. Los demonios adultos machos, suelen ser más grandes que las hembras. Pesan hasta 14 kilogramos. Cuando son adultos, la cabeza y el cuello pueden ocupar casi un cuarto de su peso. Eso se debe a que necesitan sus poderosas mandíbulas para atravesar los huesos.

demonio de tasmania

2.       Clasificación

El demonio de Tasmania es un marsupial. Su nombre científico, es Sarcophilus Harrisii que significa el amante de la carne. Harris es el nombre del científico que descubrió el demonio de Tasmania. Las marsupiales hembras tienen bolsas en las que llevan a sus crías. La bolsa ayuda a la madre demonio de Tasmania a alimentar y proteger a los demonios recién nacidos. Hay cuatro tetillas en la bolsa, para que pueda alimentar a cuatro diablitos al mismo tiempo.

3.       ¿Son peligrosos?

Los demonios no son peligrosos. No atacan a las personas, aunque se defenderán si son atacados o atrapados. Los demonios pueden parecer feroces, pero preferirán escapar antes que luchar. Sin embargo, tienen poderosas mandíbulas y cuando muerden pueden causar lesiones graves.

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4.       ¿De qué se alimentan?

Su alimentación está basada en carne de todo tipo, estos comen pescado, insectos, serpientes, anfibios y en ocasiones han sido vistos comiendo carroña. Lo interesante es que trituran hasta los huesos, comen sus entrañas y también el pelaje. A menudo comen carne medio podrida, y hurgan en los arbustos. Por supuesto, también les gusta la carne fresca.

5.       Forma de vivir

Aunque su tamaño pequeño los describa lentos y holgazanes, es todo lo contrario. Este pequeño animal escala árboles, montañas y es un nadador espectacular. Además, suele caminar y recorrer grandes distancias desde su madriguera a punto donde encuentre comida.

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6.       Es independiente

Por lo que se conoce, los demonios no van en manada como otras especies. A veces, muchos de ellos se pueden encontrar en un lugar al mismo tiempo e incluso pueden intentar cazar al mismo animal. Pero, eso no significa que estén organizados o trabajando juntos de ninguna manera. En su mundo ser independiente es la actitud.

7.       Ciclo de vida

El periodo de gestación de una hembra Tasmania es de apenas 21 días. La madre, puede dar a luz a 20-40 crías, que son aproximadamente del tamaño de un grano de arroz. Sin embargo, ella solo tiene cuatro tetillas en su bolsa, así que solo los primeros cuatro ganan la oportunidad de sobrevivir. En esa bolsa, permanecen 4 crías durante 4 meses.

Cuando los diablillos están listos para salir de la bolsa, la madre los deja en una cueva. Se consideran maduros cuando tienen dos años. Sin embargo, solamente viven durante unos cinco o seis años, aunque si las condiciones son buenas pueden vivir hasta siete.

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8.       Están en peligro de extinción

La causa fundamental de que esta especie esté en peligro de extinción, es la aparición de un tumor extraño en sus cabezas. A ciencia cierta, no se sabe a qué se debe. Pero, les causa hemorragias cerebrales causando una muerte súbita.

9.       ¿Son tiernos?

En cierto modo son tiernos, ya que son muy protectores y responsables con la familia. Cuando tienen crías, siempre están atentos al cuidado de ellos. La mamá nunca los deja solos e impide que anden lejos de la madriguera.

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10.   ¿Tienen depredadores?

Antes de que se extinguieran los lobos de Tasmania ellos eran su mayor depredador. También, las grandes aves rapaces como las águilas, pueden perseguir a los demonios jóvenes cuando salen de día. Por la noche, los búhos grandes pueden atacarlos también. Y si tienen demasiada hambre, los demonios grandes incluso pueden comer a los más pequeños.