El mundo contiene diferentes ecosistemas, diferenciándose entre sí, por sus condiciones climáticas. Propicio para algunas especies solo vivan en esas zonas. Ejemplo el Pingüino Emperador, que solo vive en el frio. A medida que el cambio climático avanza, estas especies corren el peligro de seguir en la tierra. No obstante los océanos cambian de forma más lenta. De igual manera la temperatura de los océanos está cambiando, algo estamos haciendo mal que esto perjudica la vida en las profundidades.
Si la temperatura de los espacios acuáticos, cambiara un grado hacia arriba o hacia abajo ¿Qué sucedería? Pues aquí te lo contaremos. Conoce las posibles consecuencias de los cambios de temperatura en los océanos.
Consecuencias del aumento de temperatura de los océanos
En principio la temperatura de los océanos aumenta, con el cambio del ambiente y segundo con las actividades humanas. Tanto natural como artificial los océanos se ven afectados. El dióxido de carbono es un gas que en combinación con otros gases de la atmosfera provocan el efecto invernadero.
Este efecto consta del siguiente proceso: la combinación de estos gases atrapan parte de la energía del planeta, por medio de la radiación obtenida por la luz solar. Aquí la tierra queda atrapada en su mismo calor, este calor obviamente aumenta la temperatura de todo incluyendo los océanos.
En la superficie oceánica este cambio es más lento, ya que en estos lugares el agua está en constante contacto con el aire fresco. Pero si este llegara a aumentar lo mismo sucedería con el agua. No obstante, las profundidades se verían afectadas por este aumento, en poco más de 50 años. Hoy todos sabemos que a mas profundidad, menos luz y menos calor.
Biodiversidad
Si los océanos llegasen a padecer algún tipo de cambio climático, la vida acuática sería un trastorno muy peligroso. Y no solo ellos, se quebraría la cadena alimenticia en este entorno y en el exterior, ya que distintas especies se alimentan de peces.
Organismos acuáticos como el Krill, las algas y los corales, los cuales son esenciales para el equilibrio en las aguas, terminarían desapareciendo, creando una catástrofe, a todas las especies que se alimentan de ellos.
Para dejar el lado negativo a un lado, nuestra atmosfera recientemente se ha recuperado. El paso de la radiación y de calor ha disminuido considerablemente. Las organizaciones que buscan preservar al mundo, de momento están dando buenos pasos.