¿Por qué nos sonrojamos?

Comúnmente, las personas se enfrentan a diversos encuentros sociales que les permite mostrarse tal y como son. Sin embargo, ciertos episodios ponen de manifiesto algunas conductas interesantes en la sana convivencia entre amigos y compañeros de trabajo. Se trata de una característica que envuelve una emoción que lleva consigo una carga de vergüenza o simple conducta manifestada como timidez. Ante situaciones comprometedoras, algunas personas se ven ruborizadas de manera muy notoria. Sin tener tal vez, una explicación a sus reacciones o a las de su organismo ante los hechos que le hacen perder el control. No obstante, teorías psicológicas plantean que sonrojarse  puede ser una razón de ira o impotencia. En conclusión, el por qué nos sonrojamos es señal de que algo internamente afecta nuestro exterior.

Por qué nos sonrojamos

¿Por qué una persona se sonroja?

Una persona se sonroja debido a que el cuerpo humano es una máquina de estímulos. Bien sean visuales, auditivos o sensitivos. Nuestro organismo libera una hormona llamada adrenalina, cuando sentimos unas determinadas emociones. La adrenalina, es una hormona vaso dilatadora por excelencia, que causa que se aumente el diámetro de la luz del vaso. Trayendo como consecuencia, la dilatación de los capilares sanguíneos.

Así, puede manejar el gran volumen de fluidos que discurren continuamente por la red circulatoria. Produciendo en las regiones inferiores, una especie de enrojecimiento temporal en una persona, conjuntamente con muchas pulsaciones en el corazón. El corazón se acelera, y la sensación de calor ahoga las mejillas y orejas. Haciendo de estas, una señal clara de intimidación que pone al descubierto las emociones más ocultas.

La psicología y el sonrojo

Ciertamente, la particularidad más común en los seres humanos y la que más nos sorprende y delata, es el hecho de no controlar un sonrojo. La sociedad  muestra ante esto una postura muy clara y es que las personas funcionan como un manojo de emociones cuando se trata de expresar desde una disculpa hasta una ráfaga de amor oculto. Los sonrojos son una expresión externa del sentir. Son símbolos de cómo otras personas nos invaden públicamente, obteniendo la respuesta a lo que desean saber.

Sin embargo hay quienes se sonrojan de ira, ya que no son capaces de mostrar su desacuerdo con alguien. Para los psicólogos las personas que se sonrojan son personas mayormente propensas perdonar y ceder ante cualquier petición.  Cuando una persona socialmente vive un evento que tenga que ver con el sonrojo, tiende a ser negativa en sus acciones básicas, lo cual hace que se convierta en ansiosa e insegura.

¿Sonrojarse puede ser una alerta del organismo?

En ciertos casos excepcionales, se experimentan sonrojos que obedecen a un problema de salud que no se ha indagado. Cuando una persona se sonroja con frecuencia, debe  acudir al médico debido al hecho de que puede estarse frente a un caso pasivo de hipertensión arterial o a un factor de hemoglobina alta. Así como también, puede haber un caso cardiovascular considerable que se manifiesta con altas temperaturas que inclusive pueden afectar los oídos.