¿Te interesa el comercio justo para ayudar a prosperar a quienes más lo necesitan? Aquí te explicamos en qué consiste y cómo puedes participar de él.
El comercio justo
El comercio justo es un sistema comercial alternativo al convencional y solidario. Su finalidad es el desarrollo de los pueblos apoyando la lucha contra la pobreza en base a ciertas normas como los salarios adecuados y las condiciones laborales justas. Implica que el trabajador tenga posibilidades de una vida digna lejos de la explotación laboral infantil. Además, promueve la equidad entre hombre y mujer, el respeto al medio ambiente y la fabricación equilibrada con el entorno natural.
Así pues, el comercio justo se considera herramienta de cooperación. Constituye un movimiento internacional en el que participan todo tipo de organizaciones, tanto del Hemisferio Sur como del Norte del planeta.
Se busca una mejor accesibilidad al mercado de productores desfavorecidos con intención de cambiar las reglas del comercio internacional, que consideran injustas. De esta forma se lucha contra la desigualdad mundial y la pobreza.
Además, según la descripción internacional que se hace del comercio justo, se basa en el diálogo, el respeto y la transparencia. Para ellos, esta es la forma de mejorar en equidad transnacional siguiendo criterios medioambientales y sociales. De esta manera se contribuye a un desarrollo más sostenible, mejorando los derechos de productores y trabajadores.
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La producción, distribución y venta según el comercio justo
Según este sistema comercial internacional, los artículos se tienen que elaborar en el seno de organizaciones y productores de comunidades desfavorecidas. La mayor parte de estas zonas se encuentran en Asia, África y América latina.
Después, las importadoras se encargan de comprar los artículos para distribuirlos entre las tiendas que ofrecen estos productos. Eso sí, todo comercio debe responder a sus principios.
Finalmente, llega a las tiendas, que lo ofrecen al consumidor final. Estas, a su vez, están obligadas a informar sobre la procedencia de cada artículo que comercializa.
En la actualidad, existen más de 100 establecimientos que ofrecen estos productos justos. Muchas de las tiendas trabajan online y son miembros de la CECJ, que engloba este tipo de comercios.
No obstante, existen otras tiendas convencionales en las que también se pueden adquirir este tipo de productos.
Finalmente, llega al consumidor, que, al elegir estos artículos, selecciona mejorar el mundo para hacerlo más equilibrado e igualitario. Hay que recordar que este sistema comercial no se basa por factores únicamente económicos, sino también ecológicos y sociales.
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En la actualidad, los productos que se comercializan bajo esta premisa son mayoritariamente alimentación y ropa. Pero también se produce mucho material infantil, juguetes, productos para el hogar, bisutería y decoración, papelería, cosmética e incluso productos personalizables.
Recuerda que todos los productos justos que adquieras deben contener ingredientes naturales, proceder de cultivos ecológicos y estar elaborados por procesos que no dañen el medio ambiente. Además, se fabrican de forma manual o mínimamente industrial, respetando los cultivos tradicionales para producir artículos de alta calidad.