El bromo, es uno de los elementos químicos descubiertos más importantes. Se le conoce también como fuego líquido. Su ubicación, es el número 35 de la tabla periódica. Desde su descubrimiento por Anthoine Balard en 1826, hemos desarrollado cientos de usos. El bromo, se consigue en bajas concentraciones con forma de sales. Gran parte de este elemento, se encuentra en la hidrosfera. El agua del mar es salada en parte, porque contiene 65 (ppm) de bromo. Sin embargo, también hay fuentes en Estados Unidos en forma de salmueras subterráneas e incluso lagos salados. Estos depósitos, son explotados comercialmente en Michigan, Arkansas y California. Para continuar aprendiendo sobre las características del bromo y sus usos, sigue leyendo.
Índice
Origen del bromo
El bromo, se origina de los restos del mar, cuyos compuestos nacen específicamente de las salmueras y sales naturales. Es por ello, que existen varios lagos que se evaporan por sí solos, debido a la presencia del bromo en elevadas cantidades. Se estima que cada año se producen de manera artificial casi 400.000 toneladas de este elemento. El mar muerto, tiene las mayores cantidades.
Características del bromo y sus propiedades
Su origen data de la época griega, donde los lugareños debido a su olor fuerte y pestilente lo reconocían al instante. Fue descubierto por el famoso químico francés Antoine Balard, quien lo identificó como un elemento de propiedad química en el año 1826. La producción comercial de este elemento, se produjo luego del auge de la revolución francesa a principios del año 1860.
Según sus características, forma parte de la familia de los halógenos, cuyas propiedades son de un líquido no metal con un color rojizo similar a la arcilla. El bromo es sumamente perjudicial para la salud humana, ya que es altamente corrosivo. Este debe ser manipulado adecuadamente y con implementos que nos protejan de la contaminación.
Efectos sobre la salud
Al tener contacto con el oxígeno, el bromo se evapora con suma facilidad, dejando en el medio ambiente un olor similar a la comida descompuesta. Mientras se esparce por el aire, deja un vapor de color rojo que resulta irritante para nuestros ojos y garganta. Si este elemento entra en contacto con la piel humana, puede causarnos graves lesiones.
Los seres humanos, tenemos la capacidad de absorber los llamados bromuros orgánicos. Esta absorción, se produce a través de la piel, la comida y durante el proceso de respiración. Estos compuestos, son usados en sprays para controlar plagas no deseadas o insectos. No solo se consideran venenosos para los insectos, también para los animales de más tamaño. Incluso, son altamente venenosos para humanos también.
Los bromuros de tipo orgánico, pueden dañar el hígado, los riñones, testículos y pulmones. Además, de generar problemas estomacales e intestinales. Es con el consumo de comida y del agua, que los humanos podemos absorber altas dosis de este compuesto. Además, los bromuros perjudican el sistema nervioso y la tiroides.
Usos del bromo
El bromo, se usa específicamente para purificar las piscinas. Pero, para esta función no se emplea en estado puro, se usa un derivado llamado bromuro de etileno. Aun siendo un derivado, es muy peligroso y debe ser empleado solo por personal autorizado. Otros de los usos del bromo, eran la fabricación de cierto tipo de gasolina, pero al evaporarse por medio de la combustión mecánica solía expedir gases altamente contaminantes. Por lo que, dejó emplearse en el sector automoción.
La medicina le da un uso especial, como disolvente de algunas síntesis orgánicas y en distintos productos farmacéuticos, especialmente en droguerías. Otros de los usos del bromo son como sedantes, y en la producción de gas y petróleo. También es un destacado emulsionante para los fotógrafos.