La comunidad científica no tiene duda alguna que la tierra se movía por sí sola, sin embargo el espacio del ecuador se mueve a 1.700 kilómetros por hora. A diferencia de los polos que se mueven hacia la tendencia del 0. Durante este periodo los agites bélicos en Europa eran significativos. Aunque no venga al caso, estos eventos fueron muro para la el estudio por parte de la Geología.
Conocemos los movimientos de la tierra, pero, cierto soldado apareció para inscribir sus teorías como un ser humano común y corriente. Este indico que algo sobre la deriva de los continentes y de cómo estos se mueven. El día de hoy te hablaremos de la teoría de la deriva de los continentes. No te retires sin antes leer esta importante información.
La teoría de la deriva de los continentes
Como siempre las ideas en aquellos tiempos al carecer de fundamentos eran tomadas por broma y objetivo de constantes burlas o señalamientos. Este fue el turno para Alfred Wegener, quien relato esta teoría.
Para algunos esta idea no fue tan descabellada, ya conocemos la historia del supe continente Pangea y de las formas exteriores de los continentes en nuestra era, que encajan a la perfección unos con otros. Lo que afirma que el movimiento de los continentes existe.
Wegener dejo sus ataduras del pensamiento alguno y bajo su propia intuición y grandes estudios planteo que algunas estructuras geológicas eran muy similares. Hoy esta teoría tiene más de 100 años, pero pasaron casi 46 años para que fuera tomada en serio. Además de estos estudios, profundizo en meteorología y fue el primer hombre en colocar una estación en la inmensa isla de Groenlandia.
Las placas tectónicas
Luego de cierto tiempo la teoría de Wegener, avanzaron significativamente. Sus conceptos llegaron tan lejos que dejaron en claro a los continentes y algunos otros de Menor tamaño. Luego de estos estudios se revelaron más de 15 placas tectónicas de gran importancia, que dejaron de ser en algunos casos para conformar los espacios de tierra que hoy conocemos.
Los científicos estiman que estas placas se mueven a 2,5 kilómetros cada año y que en otros millones de años debido a la unión o rompimiento tendrías más o menos continentes. Lo poco que se sabe de los terremotos podría terminar de atar los cabos sueltos. Predecirlos además de evitar catástrofes nos ayudaría a visualizar el destino de algunos continentes y no verlos tan común, como están hoy a la deriva del tiempo.