Todos sabemos que lo más tierno en el mundo son los gatitos y los cachorros, aunque prácticamente cualquier pequeño animal también lo es. No importa en qué parte del mundo estés, es muy difícil que conozcas a alguien que no ame la foto de un pequeño animal. El caso es que la ternura transciende las culturas, entonces, ¿por qué los cachorros generan este sentimiento? Aquí te traemos la receta de la ternura, que explica por qué sucede.

¿Por qué los animales son tan tiernos?

La receta de la ternura propone dos teorías que explican esto. La primera es que los animales pequeños pueden generar ternura porque se parecen mucho a los bebés humanos. Y por supuesto, desde el punto de vista evolutivo esto es una gran ventaja, ya que nos provoca cuidar a los bebés.

Y la segunda teoría propone que la ternura nos permite crear un fuerte vínculo con los animales. En algún momento de nuestra evolución, este vínculo resultó ser una ventaja para nosotros, aunque no se sabe exactamente en qué sentido.

receta para la ternura

La ternura producida por un cachorro permite crear fuertes vínculos con el animal.

La receta de la ternura

Si bien los animales más tiernos son los tradicionales como perros o gatos, también existen otros que pueden resultar ser tiernos o no. Entonces, ¿existe una receta para la ternura? La verdad es que sí. Por ejemplo, ¿recuerdas en la película de Shrek los ojos del Gato con Botas? La razón por la que era tan tierno es porque los ojos grandes permiten generar ternura en nosotros.

Otro punto muy importante son la cara, un cuerpo un poco gordo y extremidades cortas y gruesas. Su gran y redonda cabeza, boca y nariz pequeñas son la receta para la ternura perfecta.

Si crees que se trata solo de una película, ¿has visto una foca bebé? Son realmente tiernas, y es que a pesar de ser animales salvajes no evita que tengamos ganas de abrazarlas por lo tiernas que son.

receta para la ternura

Los animales con cabeas grandes, boca pequeña, nariz pequeña y grandes ojos son los más tiernos.

¿Por qué sucede esto en verdad?

Dos investigadoras de la Universidad de Yale realizaron un estudio, donde un grupo de participantes debía ver varias fotografías de animales tiernos o normales. Cada participante tenía envoltura plástica de burbujas. Quienes veían fotos de animales tiernos explotaban muchas burbujas en comparación con los animales normales.

Si bien este estudio no explica en realidad por qué nos genera tanta ternura. Lo cierto es que puede demostrar que existe una especie de “agresión” a la ternura. Aún no se sabe con exactitud por qué pasa. Pero quizás se trate de un intento por evitar las emociones positivas extremas causadas por la ternura.