Hoy en día, somos capaces de fabricar vehículos autónomos que nos llevan de un sitio a otro sin mover un dedo. Incluso existen ya prototipos de automóviles voladores, con diversos combustibles, e incluso híbridos, que te llevarán por carretera y mar. Pero, si hablamos de la persona que inventó el coche de gasolina, hemos de marcharnos más de 100 años hacia el pasado. Quédate con nosotros para descubrir quién fue Karl Benz.
¿Quién inventó el coche de gasolina?
Efectivamente, este honor debe recaer en Karl Benz. Este fue el hombre que inventó el coche de gasolina, que fue patentado en 1885. Al menos, el primero del que tenemos noticias, o que ha llegado oficialmente hasta nosotros como el pionero.
Seguro que te suena el nombre de Benz, ¿verdad? Sin embargo, este apellido alemán no fue seguido de Mercedes hasta hace unos años. Previamente, ya en 1879 había logrado desarrollar un motor de gasolina con una unidad de cilindro de dos tiempos. El éxito de este invento le sirvió para integrarlo en un vehículo ligero con chasis y motor, que tardó unos años en desarrollar.
En aquellos tiempos de revolución industrial, Benz pudo lograr el desarrollo de un vehículo de dos plazas. Para este invento, pidió la patente el 29 de enero de 1886. Así que fue el primer coche impulsado con motor a gas. Nacía el automóvil, aunque no fue hasta el 3 de julio cuando se hizo pública la aparición del Benz Patent Motor Car de tres ruedas.
¿Eran fiables estos primeros coches?
Evidentemente, no tenían la fiabilidad de que disponen hoy en día. No obstante, para cubrir pequeñas distancias, eran perfectos. Así las cosas, la esposa de Karl Benz, Bertha, junto con sus hijos Eugen y Richard, decidieron embarcarse en un viaje de larga distancia que les llevó idea y vuelta de Mannheim a Pforzheim. Y lo lograron, haciendo un total de 180 kilómetros.
Así que, en 1888, año del viaje de Bertha Benz, ya se sabía de las enormes posibilidades de estos vehículos a motor. Estaban llamados a acabar con los coches a caballo.
Tanto fue así, que pronto nació la Benz & Cía., la compañía de Karl Benz, que comenzaría a ensamblar vehículos cada vez más potentes, eficaces y fiables.
Aunque las primeras fábricas de producción en masa todavía tardarían unos años en llegar, Benz ya logró sacar al mercado 1200 unidades del Benz Velo, en 1894. Este fue el primer vehículo compacto, ligero, resistente y muy barato.
Desde entonces, ya conocemos la historia. Poco a poco nacieron otras marcas en manos de empresarios como Henry Ford, que veían claramente el futuro de este invento. Hoy, el parque automovilístico mundial cuenta los vehículos por miles de millones, algunos, capaces de circular solos. ¿Imaginaría algo así Karl Benz?