El folclore japonés está repleto de fantasmas, demonios y monstruos raros. Muchas de estas criaturas pueden clasificarse como yurei o yokai. Los yurei son fantasmas que no pueden ir al otro mundo por haber muerto violentamente o buscan venganza, algo así como las almas en pena. Mientra que los yokai son los “monstruos”, aunque algunos parecen humanos y otros parecen objetos inanimados.
1) Jorogumo
Jorogumo es un monstruo cuya parte superior del cuerpo es una mujer y su parte inferior es del cuerpo de una araña. Esta es una criatura del folclore japonés que tiene cierta controversia, ya que algunos opinan que se trata de una araña mágica capaz de convertirse en mujer.
Al buscar hombres para comer, oculta su mitad inferior. Algunas veces aparece cargando un bebé hecho de huevos de araña. Cuando encuentra a su víctima, le da este bebé para aturdirlo y envolverlo en una red y comérselo.
2) Ubume
Ubume es un fantasma de una mujer embarazada que murió durante o antes del parto. Algunas veces toma la forma de una joven hermosa, algunas veces toma una forma de mujer vieja y fea.
En las noches más oscuras y tormentosas, se le puede ver llorando y sosteniendo a un bebé en sus brazos. Si un extraño se ofrece a ayudarla, Ubume desaparece al darle su bebé a la persona. Luego el bebé se empieza a poner pesado hasta convertirse en una roca y aplastar a quien la tiene.
Ubume.
3) Akaname
El Akaname es un demonio rojo del tamaño de un niño, lame el sucio y los desperdicios con su larga y pegajosa lengua. Tiene una piel grasa, cabello viscoso y camina en cuatro patas, su lugar favorito es un baño sucio. A pesar de parecer útil, es capaz de propagar enfermedades a donde vaya.
4) Umibozu
Generalmente quien se encuentre con un Umibozu tiene muy pocas probabilidades de sobrevivir. Se trata de una criatura marina parecida a un humano pero de piel oscura. Pero mucho más grandes, a tal punto que nadie los ha visto por encima de sus hombros. En las noches más tranquilas, aparecen de repente atacando a los barcos, aplastándolos o provocando fuertes olas.
Algunas veces, el Umibozu puede pedirle un barril a la tripulación del barco. Si la tripulación le da el barril, el espíritu llena el barril con agua insana y lo arroja al barco para ahogar a todos.
La única manera de detenerlo es dándole un barril sin fondo. De esta forma, el espíritu seguirá tratando de llenarlo y la nave tendrá una oportunidad para escapar. Por otro lado, Umibozu significa “monje marino” y se cree que son espíritus vengativos de sacerdotes ahogados.
Umibozu.
5) Jubokko, vampiro del folclore japonés
Los vampiros son muy populares y por supuesto, en el folclore japonés los hay, aunque un poco extraños. El Jubokko es un árbol chupasangre, ¿pero cómo es posible? Se dice que estos árboles estaban en el campo de batalla y por ello desarrollaron el gusto por la sangre.
En un principio solo absorbían la sangre derramada en el suelo hasta sus raíces. Pero con el tiempo, se volvieron tan adictos que sujetaban a los humanos con sus ramas al pasar, los atacaban y chupaban toda su sangre. No se sabe muy bien cómo se puede matar a un Jubokko, pero si lo abres sangrará como una persona.