En el mundo existen diversos fármacos que las personas han convertidos en drogas u alucinógenos. En esta ocasión te hablaremos de un analgésico que nació como un fármaco común, como la ketamina, que luego se convirtió en una droga. Esta misteriosa formula apareció por primera vez en la década de los 60. Luego de este  Boom se consideró un producto ilegal, si no se tenía la indicación médica respectiva.Tenerla en tus manos y no demostrar por qué se usó podría llevarte a la cárcel, en aquellos tiempos. Sin embargo, esta medicina en la actualidad ya no es tan común. El uso de la Ketamina era especialmente para las enfermedades neurológicas. En el día de hoy te hablaremos de sus efectos. Si deseas conocer más acerca de ella, no te retires.

Efecto de la ketamina

Hace poco de medio siglo, cuando esta medicina comenzó a usarse, la misma tuvo un impacto tan efectivo, que se empleó como analgésico y como anestesia. Es tan potente, que hacía que la persona que la tomara, entrara en cierto cuadro de inconciencia. Durante su experimentación en el cuerpo, el paciente no se enteraba de nada. Hoy en día solo se usa en ciertos animales, cuando sufren grandes fracturas.

Los efectos de la ketamina

Cuando las personas decidieron emplearla como droga, los resultados eran psicodélicos, cometiendo actos inhumanos. Era tan fuerte que los consumidores se hacían daño entre ellos o a sí mismos.

Sus efectos son tan fuertes que las personas tienden a sufrir alucinaciones, dependiendo del problema de la mente. Asi como distorsiones de la realidad y de su cuerpo. Hasta cierto punto los científicos lo consideraron un medicamente paranormal. Capaz de llevar a la persona a otro plano.

Efectos a largo plazo

Entre los efectos de la Ketamina tenemos graves daño que sufre el sistema urinario, asi como la vejiga. El cerebro padece de enfermedades cognitivas y episódicas. Los agentes de la droga con el pasar del tiempo actúan sobre las neuronas, creando un patrón ilusorio que afecta a las demás.

Los efectos de la ketamina

Esta medicina puede llegar a ser mortal, ya que el cuerpo crea resistencia ante la degeneración de neuronas. Esto incide, en el consumidor, creyendo que puede soportar elevadas cantidades. De continuar el consumo exagerado, los daños varían desde problemas motores, parálisis faciales o totales y muerte cerebral.

De momento el uso de esta medicina es limitado, como lo mencionamos antes en animales. Además, su producción ha disminuido en busca de evitar la propagación de la droga.