Cuando tu vida cuelga de las decisiones de otros, o en tus manos tienes la solución para otro de qué forma lo veríamos. En ambos casos, uno pierde y la otra gana, que factores influyen en ambos casos, es la teoría del dilema del prisionero. Veamos de qué se trata este tema tan complejo.
El ser humano es tan diferente y diverso de comportamiento, que según las ciencias que nos estudian somos un universo de decisiones. Ciencias como la Psicología, Pedagogía y al astrología opinan que el ser humano es tan amplio como el universo mismo. Determinante y diferente, aun cuando se trata de tomar decisiones. Todos vemos las situaciones de diferentes maneras, y solucionamos nuestras vidas de maneras diferentes. Aunque las salidas sean sencillas optamos, hasta por las más difíciles.
Dilema del prisionero y el juego mental
El dilema del prisionero es considerado un problema bajo fundamentos de algún juego. En algunos casos, la persona muestra bajo niveles de cooperación, sin importar que supere sus intereses. Podríamos decir que esta fórmula se emplea para descifrar las decisiones de los reclusos o presos, que han cometido un delito menor. Por lo general, el acertijo consiste en que este, delate a su posible compañero ante algún tribunal.
Todos sabemos que la ley, lo primero que ofrece a un recluso, sea cual sea el delito, es si colabora en la investigación. Con esto, obtiene una zona para estar preso mas cómoda, con visita de familiares, conyugues e hijos, incluso la reducción de la pena. El método se aplica cuando los compañeros están en celdas separadas, inhibidos de toda comunicación. Eliminando así, que uno sepa del otro que puede indicar a las autoridades, o simplemente que decisiones toma. Es aquí donde la dude inunda al lado contrario, preguntándose si le hundirá o no.
Esto impide que los reclusos pacten sus decisiones, evitando así hacerse daño. De hecho es tan fuerte el lazo, que culpan a un tercero, librándose ambos. Pero sin conocimiento del otro lado, como te afecta esa decisión ¿qué harías?
Posibles soluciones
- Ningún preso se delata: bajo este plano, ninguno de los presos se culpa, bajo este sistema ambos cumplirían la misma condena en años.
- Solo uno delata: Cuando uno de los dos culpa al otro, el señalado triplicaría en años de condena, mientras el que delato pagaría poco al solo ser cómplice.
- Los dos presos delatan a su compañero: Si ambos se culpan, la condena seria de la mitad +2 años.
- Declaración de culpabilidad: Si ambos se declaran culpables, aunque es un caso difícil, pagaran de la misma forma la cantidad de años de condena, sin perdón alguno (Dependiendo en algunos casos del delito).