En la sección del día de hoy te comentaremos todo sobre cómo se lanza un satélite. Los lanzamientos de satélites desde la tierra son muy importantes desde cualquier punto de vista. Estos han mejorado muchas cosas para la humanidad aportando en tecnología y comunicación, derivando en otros aspectos como el económico.
El lanzamiento del Columbia es uno de los satélites más conocidos. Estos satélites no son tripulados y se colocan en la órbita de la tierra. No obstante, enviarlos al espacio no es una tarea sencilla como lo parece.
Cómo se lanza un satélite desde la tierra
Los satélites lanzados desde la tierra orbitan a una altura entre los 10.000 y 35.000 kilómetros de altura. Su desempeño y objetivo dependen en algunas ocasiones de la altura en que estos se encuentran.
Funciones de los satélites
Dentro de sus funciones están las siguientes:
- Fotografiar la tierra desde puntos altos para obtener mejores resultados cuando se estudian los relieves y las placas tectónicas.
- Estudiar los distintos ecosistemas y los cambios climáticos.
- Se emplean como armas militares de defensa aérea de cualquier territorio.
- Mejoran considerablemente las comunicaciones y la transferencia de datos.
Su preparación
Después del estudio y preparación de sus componentes, los satélites son construidos pieza a pieza y de manera perfecta. Un error causaría su caída al momento de salir de la corteza terrestre. Antes de su lanzamiento, un gran camión lleva el satélite a un punto en especifico. Ahí es enganchado al cohete con el que saldrá al espacio. Este paso se realiza con un movimiento muy lento y supervisado rigurosamente con el objetivo de cuidar las partes más delicadas del satélite.
Para la ignición, el clima terrestre debe estar despejado de nubes, lluvias o actividad eléctrica. Los cohetes siempre están repletos de cargas explosivas con el fin de desintegrarlo en el aire por si algo sale mal.
Cuando el cohete despega, es impulsado por una serie de motores que van encendiendo en momentos cruciales y secuenciales. De esta forma consiguen salir de gravedad de la tierra, y levantando el peso. Cuando el satélite llega a su posición este se separa en dos mitades, por dos explosiones tácticas, dejando al satélite en su punto exacto. Luego, desde los ordenadores terrestres, se encienden y se preparan sus componentes dejándolo listo para comenzar su trabajo.