La caja negra de un avión es un dispositivo de grabación muy bien protegido, muy parecido a un disco duro o tarjeta de memoria. En esta caja, están registrados todos los datos importantes del vuelo, así como las conversaciones en la cabina del piloto. Antes los datos debían ser registrados en dos dispositivos diferentes. Aunque hoy en día la tecnología permite incluso que una unidad pueda hacer dos cosas. Sin embargo, las regulaciones indican que los aviones deben contar con dos cajas negras.
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Resistente y fácil de encontrar
Una caja negra debe soportar casi cualquier escenario de accidentes sin sufrir daños. De manera que antes de ser usadas, se ponen a prueba para ver si pueden resistir el impacto contra un muro de concreto a una velocidad de 750 km/h. También pasa por pruebas como soportar una temperatura máxima de 1.100 grados Celsius durante una hora. Presión del agua a una profundidad de 6000 metros, y un peso de 2.25 toneladas por cinco minutos.
Pero también deben ser muy fáciles de encontrar en el mar. Para esto, estos dispositivos deben enviar señales al entrar en contacto con agua salada. Esta señal debe ser vista en un radio de hasta dos kilómetro.
Debe grabarlo todo
La grabadora de voz registra cualquier sonido que ocurra en la cabina del piloto. Así como también cualquier discusión que tengan los pilotos, avisos automáticos de las computadoras, el tráfico de radio, anuncios a los pasajeros y discusiones con la tripulación. Los sonidos de los motores y de los interruptores también quedan grabados en la caja negra de un avión.
La caja negra de un avión debe grabar hasta la conversación más privada entre los pilotos. Así como anuncios a la tripulación, y cualquier sonido del avión (incluyendo motores e interruptores).
Esto implica que incluso las conversaciones más privadas que tengan los pilotos son registradas en la caja negra. De manera que los archivos de audio grabados deben ser cuidadosamente manejados para la protección de datos. Por esta razón, las grabaciones son sobrescritas luego de 120 minutos, aunque dispositivos más viejos solo grababan 30 minutos.
La cantidad de datos es cada vez mayor
Cuando se trata del registrador de vuelo (el segundo componente de la caja negra de un avión), los pilotos no pueden acceder a estos archivos. En aviones más viejos, era necesario encender los dispositivos antes de iniciar los vuelos, pero en aviones actuales es automático.
La cantidad de datos registrados por una caja negra pueden llegar a miles. Estos aparatos también incluyen parámetros importantes como altitud, trayectoria de vuelo, ubicación de la nave, temperatura del motor y del escape, velocidad, posición de las aletas, etc.
¿Para qué sirven todos estos datos?
Los datos recopilados por la caja negra de un avión, permiten investigar la causa de un accidente o incidente. De esta manera se reducen las posibles fuentes de un error. Sin embargo, con este dispositivo no es posible reconstruir un vuelo por completo.
Otros datos interesantes sobre la caja negra de un avión
Muchas personas creen que son utilizados animaciones o simuladores de vuelo. Pero se puede obtener la información deseada desde los parámetros.
La caja negra de un avión no es negra, sino color naranja brillante
Muy pocas agencias en el mundo son capaces de evaluar una caja negra, y no todas ellas son capaces de examinar los distintos modelos. También cabe destacar que la caja negra de un avión no es realmente negra, sino naranja brillante.