Los 5 nidos más alucinantes del reino animal

¿Quieres saber cuáles son los nidos más alucinantes? Los animales construyen su nido en función de sus necesiades, pero algunos animales hacen unos nidos de los más particulares. Vamos a conocerlos.

Los nidos más alucinantes del reino animal

La trampa del pájaro moscón

Estas aves han perfeccionado sus nidos hasta realizar una entrada falsa para los depredadores. Estos nidos tienen una puerta secreta donde esconden sus huevos y pollos al fondo. Para entrar el pájaro debe abrir la entrada con el pico y las patas y, una vez dentro, la propia estructura colapsa haciendo el cierre y ocultandola del resto de animales. Esta realizado con forma de botijo que usa seda de araña.

Castillos de las termitas

Es uno de los nidos más grandes del mundo y sobretodo teniendo en cuenta el tamaño de sus habitantes. Las termitas realizan unos montículos con túneles, salas y conductos que funcionan a modo de edificio con su sistema de ventilación, cámara esferoidal central y bodegas. El material con el que está construido procede de la excavación de los túneles bajo la superficie.

La funda del tricóptero

Los tricópteros, también llamados frigáneas, son unos insectos parecidos a las polillas. Realizan la metamorfosis completa desde larva hasta animal adulto, pero los tricópteros lo hacen en el agua. Como estos animales están en el fondo cuando son orugas recogen grava, restos de vegetales o conchas para hacer un tubo alrededor de su cuerpo. El resultdo es un nido tubular de varios centímetros de longitud.

El nido zen del pez sapo

Otro de los nidos más alucinantes es el de este pez que sirve como reclamo sexual. Como si de un jardín de arena zen se tratase, este pez realiza unos complejos patrones circulares en la arena que además sirve para atraer a la hembra gracias a las corrientes de agua que genera mientras lo construye.

Las hormigas tejedoras

Entre las muchas formas que las homigas pueden realizar su nido, éstas hormigas tejedoras eligen un nido alucinante. Está hecho en los árboles y formado por las hojas del mismo unidas por sus própias larvas. Requiere una coordinación entre todo el grupo de obreras que transmiten mediante comunición por feromonas. Para construirlo un primer grupo de hormigas se aferra al margen de una hoja, y luego otro grupo camina sobre ellas hasta el final agarrandose a las primeras, y así varias filas hasta alcanzar la nueva hoja del árbol. Entonces, usando sus larvas exudan una especie de seda y tejen las uniones entre las hojas.

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