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Naturaleza

Los ciempiés, 8 datos curiosos

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Los ciempiés son artrópodos, pertenecientes a una clase de invertebrados junto a los insectos, crustáceos y arañas. Absolutamente todos los ciempiés, forman parte de la clase Chilopoda, que cuenta con cerca de 3.300 especies distintas. Estos insectos se encuentran en todos los continentes a excepción de la Antártida, y tienen muchas formas y configuraciones en los ambientes cálidos y tropicales.

Índice

  1. Algunas curiosidades sobre los ciempiés
    1. Es falso que tengan 100 pies
    2. Son cazadores carnívoros
    3. Las circunstancias de su vida pueden cambiar su número de piernas
    4. Prefieren vivir en ambientes húmedos y oscuros
    5. Algunos consideran que son buenas mascotas
    6. Son relativamente longevos
    7. ¿Los ciempiés son peligrosos?
    8. Son realmente rápidos

Algunas curiosidades sobre los ciempiés

La mayoría de ellos pueden excavar y viven en el suelo, bajo las piedras o debajo de la corteza de los árboles. Los cuerpos de estos insectos cuentan con seis segmentos de la cabeza (3 son partes bucales), un par de maxilípedos venenosos, unos segmentos numerados de varias formas y dos segmentos genitales. Sus cabezas tienen dos antenas y un número de ojos que pueden variar pero que son compuestos pareados. Aunque algunas especies de cuevas son ciegas.

Es falso que tengan 100 pies

Aunque su nombre da a entender que debe tener 100 patas, la verdad es que pueden tener más o menos de 100 patas pero nunca 100. Según sea la especie, un ciempiés puede llegar a tener hasta 15 pares de patas o hasta 191 pares.

Aunque se llamen ciempiés, nunca tienen 100 patas en realidad. Sino entre 15 y 191 pares.

No importa de qué especie se trate, los ciempiés siempre tendrán un número impar de pares de patas. De manera que jamás tendrán exactamente 100.

Son cazadores carnívoros

Estos son insectos cazadores. Los ciempiés más pequeños cazan otros invertebrados como insectos, anélidos, moluscos y hasta otros ciempiés. Las especies tropicales de mayor tamaño pueden comer aves pequeñas o ranas. Por lo general, se envuelve alrededor de su presa esperando que el veneno haga su efecto antes de consumirla.

Las circunstancias de su vida pueden cambiar su número de piernas

Si un ciempiés está en las garras de algún depredador, pueden escapar sacrificando algunas de sus piernas. De manera que un ave podría quedarse con el pico lleno de sus patas y el este escapa con la que les quedan.

Debido a que estos insectos mudan piel al ser adultos, pueden reparar el daño ocasionado durante su huida para sobrevivir y regeneran sus piernas. Así que si ves algún ciempiés con piernas más cortas que otras, seguramente se recupera de algún ataque.

Prefieren vivir en ambientes húmedos y oscuros

Generalmente, los artrópodos cuentan con un recubrimiento ceroso en la cutícula, así evitan perder agua. Sin embargo, los ciempiés no cuentan con esta impermeabilización y por eso buscan ambientes húmedos y oscuros para vivir.

Mientras que los que viven en desiertos o ambientes áridos, deben cambiar su comportamiento para evitar deshidratarse. Por ejemplo, pueden retrasar su actividad hasta que llegan las lluvias estacionales o cuando la humedad aumente.

Prefieren vivir en lugares oscuros y húmedos, como debajo de la corteza de un árbol o en madera podrida.

Algunos consideran que son buenas mascotas

Existen criadores de ciempiés, pero la mayoría de los vendidos como mascotas son capturados en su naturaleza. Los más vendidos como mascotas o para exhibiciones zoológicas son los ciempiés gigantes del género Scolopendra. Estos pies son terrarios y requieren al menos un espacio de 60 centímetros cuadrados.

También necesitan un sustrato elaborado de tierra y fibra de coco en el que puedan excavar. También se alimentan con grillos muertos, cucarachas y gusanos de harina semanalmente o cada dos semanas. Y un plato con agua de poca profundidad.

Recordemos que estos insectos son agresivos, venenosos y posiblemente peligrosos para los humanos (en especial para niños). Una picadura de ciempiés puede provocar daños en la piel, ampollas, inflamación, moretones y hasta gangrena. Así que su espacio debe ser a prueba de fugas y aunque no puedan escalar el vidrio, no les brindes la forma de llegar hasta la tapa.

Son relativamente longevos

Aunque se trate de artrópodos, los ciempiés pueden durar entre dos y cinco años. Y a diferencia del resto de los insectos que completan su crecimiento cuando son adultos. Los ciempiés siguen mudando su piel y continúan creciendo en la etapa adulta.

¿Los ciempiés son peligrosos?

Generalmente no te harán daño y son inofensivos. Pero los ciempiés más grandes si pueden causar una terrible mordedura a los humanos. Sin embargo, es raro que esta picadura cause reacciones graves a menos que seas alérgico. Pero una picadura de uno grande podría compararse con la picadura de una abeja, en cuanto al dolor.

Son realmente rápidos

Los ciempiés son conocidos por ser muy veloces y arrastrarse con rapidez. Normalmente lo hacen para buscar sombra, huir de depredadores o alcanzar sus presas. El resto del tiempo, están en reposo evitando deshidratarse.

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